Madrid se olvida de las eBikes en las ayudas para vehículos eléctricos

La Comunidad de Madrid pondrá en marcha a partir de este viernes 14 el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (Plan MUS), un programa de ayudas económicas para los ciudadanos que adquieran vehículos eléctricos y no contaminantes. Las subvenciones, con las que se pretende fomentar la movilidad sostenible y, por lo tanto, la disminución de las emisiones de dióxido de carbono y la mejora de calidad del aire, se moverán entre los 500 y 5.000 euros. El valor de la ayuda dependerá del tipo de vehículo adquirido y de su precio. En total, la Comunidad de Madrid destinará dos millones de euros para financiar el Plan MUS.

Sin embargo, la administración pública se ha olvidado por completo de las bicicletas eléctricas, un medio de transporte ya consolidado en muchas ciudades peninsulares que no se incluye en el programa de ayudas. Así, el Plan MUS engloba los turismos M1, vehículos con al menos cuatro ruedas con motores de combustión interna que utilicen combustibles fósiles alternativos, homologados como GLP, gas natural comprimido o bifuel gasolina-gas, o vehículos eléctricos puros, de autonomía extendida o híbridos enchufables; cuadriciclos ligeros propulsados por motores eléctricos, con un peso inferior a 350 kg y una velocidad máxima que no supere los 45 km/h; y motocicletas eléctricas L3e, L4e y L5e con una velocidad superior a los 45 km/h. Sin rastro, por lo tanto, de bicicletas eléctricas y de la última tendencia en movilidad sostenible, el patinete eléctrico.

Los concesionarios y puntos de ventas adheridos al Plan MUS tendrán que ser autorizadas por la Comunidad de Madrid. En los turismos M1, el descuento mínimo es de 1.000 euros y, en el caso de los vehículo eléctricos, los puntos de venta deberán facilitar la instalación de un punto de recarga al comprador con un coste máximo de hasta 1.000 euros. El comprador, sin embargo, también puede renunciar a la instalación del punto de recarga con una solicitud previa.

Con el Plan MUS, la Comunidad de Madrid sigue dando la espalda a la bicicleta. Solamente el Ente Vasco de la Energía y el Área Metropolitana de Barcelona, instituciones que operan en regiones con otros puntos de vista más adaptados al presente, ayudan a la promoción de la movilidad sostenible.